Ángeles Caídos: Ron Mercer

Ronald Eugene Mercer nació el 18 de mayo de 1976 en Nashville, Tennessee. Sus primeros pasos en el baloncesto los dio en Oak Hill Academy, uno de los institutos más prestigiosos del país donde empezó a despuntar y a hacerse con un nombre. En sus años de Junior y Senior fue nombrado “Mr. Basketball”, premio oficioso que se otorga al mejor jugador de instituto del país, anotando más de 26 puntos por partido en su último año de High School.

Con estas credenciales las universidades se agolpaban en la puerta de Mercer tratando de convencer al escolta de que se integrase en sus equipos. Finalmente la decisión de Mercer fue enrolarse con los Wildcats de la Universidad de Kentucky, dirigidos por Rick Pitino, y con jugadores de la talla de Antoine Walker, Tony Delk, Derek Anderson, Nazr Mohammed, Walter McCarty o Mark Pope formaron un equipo temible.

En su primer año con los Wildcats su aportación al equipo fue modesta, aunque interesante para un novato. Con algo más de ocho puntos por partido ayudó a Kentucky a alzarse con el título del año 1996 en un soberbio partido final. Con 20 puntos ante Syracuse en aquella final, sólo superado por su compañero Tony Delk, Mercer tenía su noche de gloria y empezaba a hacerse un nombre también en la NCAA.

La salida de jugadores importantes como Delk o Walker, así como su propia progresión, abría de par en par las puertas del éxito a Mercer que en su segunda campaña con los Wildcats formaría el conocido como “dúo dinámico” junto a Derek Anderson. La lesión de rodilla en enero de Anderson dejaba a Mercer con toda la responsabilidad anotadora del equipo y el fenomenal escolta no decepcionaba anotando más de 18 puntos por partido. La llegada de los jóvenes Jamaal Magloire y Scott Padgett también ayudó a la consolidación del campeón, y por segundo año consecutivo Mercer alcanzaría la Final Four de la NCAA.

Pero esta vez no pudo ser y una Arizona con jugadores como Mike Bibby, Michael Dickerson o Jason Terry dejaban a Mercer, fantásticamente defendido, con sólo 13 puntos y 9 lanzamientos intentados pero 9 rebotes y 6 asistencias, a las puertas de repetir la hazaña, tras una prórroga en el partido final.

Tras esta brillante carrera universitaria decidió este mismo año dar el salto al profesionalismo. Antes de la selección de Mercer, Pitino hizo unas declaraciones diciendo que no preveía que el jugador fuese seleccionado en un puesto alto dado que no tenía el talento necesario. Algunos tomaron esto como un intento de que el resto de equipos perdiesen interés en la elección de Mercer y de esta forma quedase disponible para cuando los Celtics tuvieran oportunidad de realizar su elección.

Fue seleccionado en el sexto lugar de la primera ronda del Draft de 1997 por los Boston Celtics donde se reunió con su entrenador de Kentucky que había sido recientemente contratado por los Celtics y con sus ex-compañeros de universidad Antoine Walker y Walter McCarty.

Su primera temporada en Boston fue realmente admirable para un novato. Con 15,3 puntos de media por partido se convertía en el segundo anotador tras Antoine Walker, pero los Celtics, sumidos en una eterna reconstrucción no terminaban de levantar el vuelo. En su segunda temporada subía hasta los 17 puntos por partido, tercero tras Walker y Pierce, pero de nuevo una desastrosa campaña de los Celtics dejaba un mal sabor de boca en Mercer. Posiblemente buscando un revulsivo para el equipo los Celtics decidieron hacer un movimiento en el mercado en la temporada 1999-2000, siendo Mercer traspasado junto con Popeye Jones y Dwayne Schintzius a los Denver Nuggets por Danny Fortson, Eric Williams, Eric Washington y una futura elección del draft. Sólo disputó 37 partidos para Denver en la temporada 1999-2000, y debido a un nuevo traspaso disputó 31 partidos con Orlando Magic, manteniendo en ambos equipos promedios por encima de los 15 puntos.

Tras esta temporada firmó un contrato como agente libre por los Chicago Bulls, de nuevo otro equipo en plena reconstrucción donde en su primera temporada anotó 19,7 puntos por partido. En unos Bulls a la deriva, tratando de reconstruir una plantilla destrozada tras la “Era Jordan” Mercer junto a Ron Artest, Elton Brand o Marcus Fizer se perfilaban como el futuro de la plantilla. Una pésima temporada de 15-67 dejaba a los Bulls como el peor equipo de aquella campaña. No mejoraron mucho las cosas en la siguiente temporada y a mitad del curso se traspasaba de nuevo a Mercer, Brad Miller, Ron Artest y Kevin Ollie a los Indiana Pacers por Jalen Rose, Travis Best, Norman Richardson, y una segunda ronda del draft. En Indiana empezarían sus problemas con las lesiones, limitándose su papel al de reserva, cayendo su juego en picado tras una temporada y media en la que permaneció en el club.

Antes de la temporada 2003-04, y posiblemente por su mala relación con la estrella de Indiana, Jermaine O’Neal, fue traspasado a los San Antonio Spurs en una carambola a tres bandas con Brad Miller y Hedo Turkoglu de Sacramento Kings. Se dice que O’Neal hizo unas tajantes declaraciones: “O lo traspasáis a él o a mi”.

Tras jugar 39 partidos con los Spurs fue liberado de su contrato con unos números en torno a los 5 puntos por partido. Antes de la temporada 2004-05, firmó un contrato con su séptimo equipo en la NBA, los New Jersey Nets.

El 15 de agosto de 2005, antes de la temporada 2005-06, Mercer fue cortado por los Nets para evitar pagar parte del impuesto de lujo de la NBA como parte del nuevo CBA. Durante la anterior campaña Mercer se había perdido 60 partidos debido a una grave lesión, desde entonces no ha vuelto a pisar una pista de juego con un equipo de la NBA.

En la temporada 2006 integró el campus de verano de los Seattle Supersonics pero finalmente sus problemas de lesiones en la espalda forzaron su retirada prematuramente a los 30 años de edad.

En agosto de 2007 Mercer se presentó a la policía para hacer frente a unos cargos por un delito menor de asalto que al parecer tuvo lugar en un club de streap-tease el 21 de abril. Al parecer se afirma que Mercer y un amigo suyo entablaron conversación con una de las bailarinas de forma no muy caballerosa. Cuando la seguridad del local les invitó a abandonar la sala se produjo una trifulca en la que Mercer golpeó en la cara al portero del club.

Otro de los ángeles caídos, brillantes estrellas que por diversas razones se han ido apagando con el tiempo.