¿Z-Bo a Memphis?

Según The Memphis Edge los Knicks y los Grizzlies han mantenido conversaciones sobre Zach Randolph.

Los Grizzlies, necesitados de talento y capacidad anotadora en el poste, se habrían fijado en Randolph para cubrir una de sus posiciones más débiles, la de power forward. Hakim Warrick y el 'rookie' Darrell Arthur son los únicos jugadores con que cuenta Memphis para fijar a los defensores en la posición de 'cuatro', toda vez que Antoine Walker se desenvuelve habitualmente lejos de la canasta y que Darko Milicic y Marc Gasol por físico y por movilidad son más bien 'cincos'.

¿Encajaría Z-Bo en la actual plantilla de los Grizzlies?... ¿y qué tendrían que recibir los Knicks a cambio?...

Para contestar a la segunda pregunta hay que tener en cuenta el contrato ascendente de Randolph... $14,6 M el primer año, $16 M el segundo y $17,3 M el tercero. Los Knicks se mueven muy por encima del límite salarial y del tope marcado por el impuesto de lujo, así que hacerse con contratos que les permitan un poco de maniobrabilidad no les vendría nada mal. El contrato de Antoine Walker ($9,3 M por un año) junto con algún joven con proyección como Warrick, Javaris Crittenton o Kyle Lowry formarían un pack bastante apetecible para los Knicks.

Sin parecer demasiado complicado de resolver esta cuestión aún quedaría la primera pregunta por responder... ¿es Z-Bo un jugador egoísta y sobre todo con un caracter difícil, como algunos hechos ocurridos en su pasado apuntan?... ¿sería una influencia negativa para los jóvenes Grizzlies?... ¿encajaría bien en el juego rápido que quiere imponer Iavaroni?...

Zach no es el cáncer que algunos pretenden vender. Es cierto que a los 14 años fue detenido por robar unos pantalones y que pasó 30 días en un centro de internamiento para menores. Que en el 97 estuvo 30 días bajo arresto domiciliario por una agresión. Que en su segundo año en el instituto volvió a ingresar en un centro para menores por vender una pistola robada. Que fue detenido en el 2002 por beber sin tener la edad permitida. Que al año siguiente, en los Blazers, golpeó a Ruben Patterson en un ojo durante un entrenamiento. Que fue detenido ese mismo año por conducir bajo los efectos de las drogas. Que en el 2004 se vió implicado en un tiroteo en una discoteca, saliendo en defensa de su hermano. Y que esta misma temporada, en los Knicks, arrojó un vaso con agua a Nate Robinson en una acalorada discusión durante un tiempo muerto.

Pero no es menos cierto que Randolph tiene un carácter afable, un gran corazón y un profundo sentido de la lealtad con sus familiares y amigos más cercanos, preocupándose entre otras cosas de que no les falten juguetes a sus sobrinos. Y que como muchos jóvenes de su generación su único vicio consiste en salir ocasionalmente a nightclubs (discotecas) y a locales de Striptease, como cuando se encontraba deprimido tras la pérdida de su abuela.

Randolph, nacido en el 81, es aún un jugador joven, con margen de mejora. Si las lesiones lo respetan va a mejorar su conocimiento del juego, siendo ya bastante mejor pasador de lo que muchos creen. A pesar de no ser excesivamente alto ni atlético puede rebotear con mucha facilidad, otro indicio de su inteligencia en la pista. Tiene mucha más movilidad de la que su físico hace preveer, y sus 122 kg y 2.06 m hacen mucho daño en el poste bajo, recibiendo de espaldas a canasta, porque su repertorio de movimientos es muy completo. Si además le añadimos un excelente lanzamiento de corta y media distancia tenemos a un jugador letal en la pintura para el equipo rival. El tipo de jugador que Pau Gasol solía ser en los Grizzlies...

La incorporación de Randolph a Memphis supondría una amenaza inmediata en el ataque posicional, crearía espacios para sus compañeros, y rebotearía de manera importante en defensa, dando el primer pase del contrataque y siendo fundamental en el juego rápido de los jóvenes Grizzlies.