Ya de vacaciones Parte I - Este:

A pesar de que Roberto ya hizo un fantástico resumen global de la temporada regular de la NBA 2007-08, me gustaría hacer un repaso más detallado a nivel de equipo donde analicemos su trayectoria en esta temporada y su posible futuro a corto o medio plazo. Lo dividiré en dos secciones, Este y Oeste para que no se haga muy extenso e iremos analizando a los equipos ya eliminados en orden inverso a su clasificación. En esta primera entrega comenzaremos por la conferencia Este:

Miami Heat (15-72):

El peor equipo de largo en la NBA esta temporada, y uno de los peores récords históricos para una franquicia que apenas hace un par de años se alzaba con el título. Más extraño aún supone el que no haya habido una renovación de la franquicia, sino que se mantiene el bloque de jugadores y entrenador que dieron como fruto el título de 2006. Bien es cierto que ya en 2006 no eran favoritos y puede considerarse como sorpresa aquel título, pero aún así a este equipo debía exigírsele un mínimo de entrar a play-off, más en una conferencia como la Este en la que la entrada estaba bastante barata.

Lo mejor: En una campaña tan desastrosa es difícil sacar algo positivo pero aún así hay cosas. La salida de O’Neal, claramente a disgusto, junto con otras finalizaciones de contrato como la de Williams dejan margen de maniobra al equipo. Manteniendo la base actual, con jugadores como Wade, Davis, Marion, Blount, Haslem. Quinn, Cook etc.. más una muy alta ronda del draft, debería el año que viene colocarles en posición de volver a aspirar a P.O. No debería haber una transición demasiado dramática.

Lo peor: La triste imagen que ha dado este equipo durante la temporada. Riley ha perdido su magia y ha sido incapaz de sacar rendimiento de una plantilla no tan mala que ha rozado el ridículo en varios partidos. La plaga de lesiones ha ayudado pero aún así 15 victorias se me hacen escasas para el talento de esta plantilla.

El futuro: A corto y medio plazo se augura un buen futuro para Miami. Como decíamos antes la flexibilidad salarial que tendrá al concluir contratos largos, junto con una altísima ronda del draft este año y mantener la base actual del equipo con jugadores jóvenes como Wade, Quinn o Cook pone en disposición de continuar peleando por puestos altos. En mi opinión, contratando a un base de garantías, Quinn es un buen suplente pero no para dirigir al equipo, como Jose Calderón o André Miller y con un nuevo técnico deberían estar en la pomada de nuevo. Considero este año como un cúmulo de coincidencias y malas decisiones más que como un equipo a la deriva.

New York Knicks (23-59):

Un nuevo año de decepciones para todos los aficionados del equipo de Nueva York. Lo que a priori se presentaba como un año ilusionante con la llegada de Randolph, creando un juego interior temible en ataque ha terminado siendo otro fracaso. La incapacidad de Isiah Thomas para dirigir la franquicia, ya sea desde el banquillo o desde los despachos, un grupo de jugadores sobrevalorados y acomodados y la pérdida del carácter que siempre ha sido la insignia de este equipo ha llevado a los Knicks otra vez a la cola de la NBA.

Lo mejor: La llegada de Donnie Walsh a los despachos del Madison puede dar ese nuevo aire que tanto necesita el equipo. Thomas parece tener sus días contados en la franquicia y la llegada de un nuevo entrenador junto con algo de sentido en la dirección técnica deberían colocar a los Knicks en 2-3 años en disposición de luchar por algo importante. Jugadores jóvenes como Lee, Robinson, Balkman, Chandler y la próxima ronda del draft más ilustres como Randolph, Curry, Marbury o Crawford, el más sólido este año, deberían ser más que suficientes para aspirar a plaza de play-off el año que viene.

Lo peor: Aparte de Thomas, que es cierto que es muy culpable de lo que sucede en el equipo, la actitud de ciertos jugadores ha dejado mucho que desear. Marbury, antigua estrella de la liga, All-Star, y pagado como tal, no pasa de ser un base mediocre hoy por hoy. Curry apático y con sobrepeso, Randolph irregular, recuperar a estos tres jugadores es básico para la plantilla. En el peor de los casos Marbury termina su “contratazo” el año que viene dejando un interesante hueco para mover el mercado. ¿Alguien dijo Lebron James?

El futuro: Dependerá mucho de que el entrenador que llegue sea capaz de motivar a la plantilla y sacarle jugo. Talento hay, y de sobra, pero hay que demostrarlo en el campo a diario y no sólo en los anuncios o viviendo de rentas pasadas. Además ya empieza a verse la luz al final del túnel de esos contratos carísimos y larguísimos que hipotecaban a la franquicia.

Milwaukee Bucks (26-56):

Equipo que se mueve en el eterno “quiero y no puedo”. Plagado de jugadores que apuntan maneras pero que no terminan de instalarse en la élite le cuesta encontrar la consistencia necesaria para meterse en la lucha por el play-off. Se eligió al chino Yi en una maniobra tal vez más económica que deportiva y no se ha sabido gestionar la situación entre Yi y Villanueva. Pese a que Yi no ha sido el “bluff” que muchos esperaban, tampoco ha pasado de tener una temporada discreta.

Lo mejor: En una temporada bastante anodina lo mejor ha sido el crecimiento lento pero seguro de Andrew Bogut, que deberá refrendarlo el año que viene para asentarse como un pívot dominante en la liga, y la explosión tardía de uno de los fenómenos del último mes en la NBA, el novato Ramón Sessions.

Lo peor: La mediocridad en la que está sumido el equipo. Su estrella, Michael Redd no pasa de ser un especialista en el tiro, capaz de grandes anotaciones pero sin esa chispa que haga de él un jugador sobre el que montar un equipo. El resto de jugadores parece que están en un impás de llegar pero que no terminan de explotar, como Bogut, Villanueva o Williams, alternando grandes partidos con otros mediocres.

El futuro: Si termina de explotar todo el talento acumulado en esos jugadores puede ser una de las sorpresas el año que viene. Hay una buena plantilla a la que le falta un punto de regularidad y chispa en los momentos definitivos. Habrá que ver la evolución de Sessions, Bogut y Yi especialmente. Deberían plantearse el tema Yi-Villanueva, dos jugadores de características similares que no parecen tener acomodo juntos. Villanueva tiene buen cartel y podrían lograr un traspaso interesante por el dominicano.

Charlotte Bobcats (32-50):

Prácticamente sellaba su destino en esta temporada antes siquiera de iniciarla. Las bajas de Adam Morrison y Sean May marcaban mucho a la plantilla que junto al rendimiento algo por debajo de Okafor han dejado a los Bobcats en el cuarto lugar por la cola en el Este. Podría decirse que han cumplido, con lo que tenían no se podía lograr mucho más.

Lo mejor: La tripleta exterior Richardson-Wallace-Felton se ha mantenido consistente durante toda la temporada y ha dado un buen espectáculo dentro de sus posibilidades. Si tanto Morrison como May vuelven a buen nivel deben dar un salto de calidad importante al equipo.

Lo peor: Sin duda las lesiones, esperemos más suerte para los de Charlotte la próxima temporada y que los lesionados vuelvan en plenitud de condiciones. Sumado a esto el equipo tiene una carencia importante en el juego interior, Okafor no ha jugado todo lo que debiera este año, aunque la llegada de Mohammed ha ayudado al equipo. La aportación del banquillo prácticamente testimonial, necesitan más aporte de la segunda unidad.

El futuro: Bastante halagüeño sin duda, un equipo plagado de talento joven con toques de veteranía que le dan consistencia. Los mejores fichajes serán la recuperación de los lesionados que deben dar mayor profundidad al banquillo. Okafor debe dar un paso adelante e instalarse definitivamente como uno de los grandes. Conocemos su capacidad en defensa pero no se prodiga en ataque tanto como debiera, no es Duncan pero podría hacer más daño.

Chicago Bulls (33-49):

Una de las mayores decepciones de la temporada. Los Bulls parecían favoritos a pelear por meterse como mínimo en la segunda ronda del play-off pero una desastrosa campaña les ha dejado fuera de la pelea por el título. Un muy mal arranque y bastante mal ambiente entre jugadores y técnico (Scott Skiles) dejaban a los de Chicago a la deriva, aunque tuvieron opciones de entrar en play-off hasta el final no lo merecieron por su trayectoria.

Lo mejor: Posiblemente la salida de Ben Wallace. El pívot no estaba aportando lo que de él se buscaba y su contrato era una pesada losa. Con su salida parece que los jóvenes Tyrus Thomas y Joakim Noah han dado un salto en sus prestaciones, junto con Drew Gooden pueden formar un juego interior interesante. Sefolosha parece que empieza a encontrar sus sitio en la plantilla, bien el suizo.

Lo peor: Equipo a la deriva todo el año que busca técnico para la siguiente campaña. Gordon no termina de encontrar su regularidad y muy decepcionante la actuación de un jugador en mi opinión muy sobrevalorado como es Kirk Hinrich. El traspaso de Ben Wallace creo que ha sido muy mal llevado, si bien era necesario, Drew Gooden y un Larry Hughes muy venido a menos parece escaso por lo que ofrecían.

El futuro: Empieza a verse complicado, hace 2-3 años eran el equipo de con mejor aspecto para dominar la liga pero no terminan de estallar y ahora hay un poco de caos en la plantilla con muchos jugadores de características similares. Verano movidito para los de la ciudad del viento.

New Jersey Nets (34-48):

Podríamos definirlo como “Crónica de una muerte anunciada”. La tripleta Kidd-Carter-Jefferson parecía ya bastante agotada, con un Kidd en el declive de su carrera, Carter siempre sobrevalorado, más pendiente de tener una buena foto que de ayudar al equipo, y un juego interior muy escaso. Por nombres puede parecer una decepción no entrar en play-off, el año pasado esta misma plantilla llegó a segunda ronda, pero los años pesan y tampoco daba ya el invento para más.

Lo mejor: El traspaso de Kidd. El jugador era una bomba de relojería para ese vestuario, se le debía buscar una salida y así se ha hecho. La llegada de Devin Harris le da un aire nuevo al equipo. Los jóvenes Williams&Williams (Sean y Marcus) deberían tener en próximas temporadas un peso mayor en el equipo, han apuntado buenas maneras al igual que Josh Boone, interesante progresión la suya.

Lo peor: En mi opinión se ha tratado de estirar demasiado una fórmula que no daba para más. En el verano hubo rumores que podrían haber sido interesantes, el equipo necesitaba una renovación pero se optó por el continuismo. Finalmente les ha estallado el globo en la cara.

El futuro: Equipo en fase de transición. La salida de Kidd y el próximo final de contrato de Carter dejan a New Jersey con la necesidad de una reestructuración de su proyecto deportivo. Hoy por hoy no parece que haya una base adecuada para ello, esperan malos tiempos para los Nets.

Indiana Pacers (36-45):

Si miramos la plantilla de los Pacers posiblemente podríamos considerar un fracaso no entrar en play-off, viendo que Jermaine O’Neal y Jamaal Tinsley se han perdido media temporada empieza a verse con otros ojos. Equipo correoso y que ha peleado hasta el último partido sus posibilidades de post-temporada.

Lo mejor: Danny Granger y Mike Dunleavy han tomado las riendas del equipo, y muy bien por cierto. Dunleavy ha cerrado este año muchas bocas que lo consideraban un “bluff” y que su apellido valía más que su juego. Kareem Rush y Travis Diener recuperados para la causa.

Lo peor: Las lesiones de Tinsley y O’Neal, con ellos este equipo habría estado peleando con Toronto y Wizards por esa zona media del play-off.

El futuro: Equipo consolidado, parece que O’Neal no está demasiado contento con su rol en el equipo y podría ser traspasado, en cualquier caso vendría un jugador de nivel similar con lo que el equipo no debería resentirse. Debería entrar en play-off el año que viene sin dificultades.