ANGELES CAIDOS: SAM BOWIE (por Z-Bo)

En esta segunda entrega -y ante el clamor popular de peticiones- profundizaremos sobre uno de los fiascos más sonados de todos los tiempos, nos estamos refiriendo al jugador elegido entre Hakeem Olajuwon y Michael Jordan, en uno de los mejores draft de la historia, el de 1984.

Samuel Paul Bowie –pívot de 2.16 m y 107 kg- comenzó a llamar la atención de numerosas universidades jugando en el Lebanon High School, en Pennsylvania. Unos promedios de 28 puntos y 18 rebotes por partido fueron suficientes para ser elegido McDonald’s All American y Parade All-American. En 1980 fue elegido para jugar con el USA Basketball Team, aunque finalmente Estados Unidos lideraría el boicot a los Juegos Olímpicos de Moscú.

En su segundo año en la Universidad de Kentucky promedia 17.4 puntos, 9.1 rebotes y 2.9 tapones por partido, demostrando tener una excelente mano para un jugador de su talla. Es entonces cuando una inoportuna lesión –una fractura por estrés en su tibia izquierda- le obliga a pasar por el quirófano, pasando dos temporadas completas en blanco.

En 1984, después de que los Rockets seleccionaran con el número uno del draft a Hakeem “The Dream” Olajuwon –procedente de la Universidad de Houston- los Blazers seleccionaron con el número dos a Bowie, que parecía totalmente recuperado de su grave lesión –los médicos le habían hecho un injerto de hueso, procedente de la pelvis, en el área de la tibia afectada-. Michael Jordan, elegido en tercer lugar por los Bulls, se convertiría en uno de los más grandes jugadores de baloncesto de la historia. La decisión de Portland en el draft, a pesar de que sobre el papel tenía su lógica –los Blazers habían elegido el año anterior a Clyde Drexler- es considerada como una de las peores en la historia de la NBA.

En su primer año en Portland sólo se pierde seis partidos, pero la siguiente temporada se fractura la tibia derecha. Nunca volverá a ser el mismo. Después de cuatro temporadas -en las que llegó a pasar hasta cinco veces por el quirófano- y 139 partidos jugados, Bowie es enviado a los New Jersey Nets a cambio de Buck Williams y de una elección en el draft, en junio de 1989. Las cuatro temporadas que pasó en los Nets fueron las mejores de Bowie –y en las que se mantuvo más sano- promediando 12.8 puntos y 8.2 rebotes por partido. Finalmente, después de dos temporadas en los Lakers, acribillado por problemas físicos, se retira del baloncesto profesional, en 1995.

En septiembre de 2007 -en una entrevista concedida a ESPN tras descubrirse la lesión de Greg Oden- Bowie confesó haber regresado demasiado pronto, tras fracturarse la tibia por primera vez en Pórtland, y que quizás esa fue la causa de sus problemas recurrentes en las piernas. “Estaba ganando mucho dinero, había sido elegido en segundo lugar en el draft y ya me había perdido partidos en la universidad” dijo. De ahí su sentimiento de culpa y su precipitación por volver a jugar.

Su dedicación para recuperarse de las lesiones y jugar -teniendo la opción de retirarse del baloncesto manteniendo su contrato- fue encomiable.